18-09-2022 – Tiempo AR –
Juntos armaron una orquesta típica para homenajear la música y el legado de su padre, el inolvidable bandoneonista de Pugliese. El resultado es “Rompelo Tano”, un disco que recrea diez de sus composiciones con una mirada contemporánea.
A manera de profundo y comprometido homenaje se editó un álbum que revisita la obra de uno de los grandes bandoneonistas de la era dorada del tango. Se trata del gran compositor e instrumentista Osvaldo «El Tano» Ruggiero, que este 22 de septiembre próximo hubiese cumplido cien años. Con el calendario como incentivo extra, sus hijos Daniel y Adrián (también bandoneonistas y compositores) lanzaron Rompelo Tano, una relectura de composiciones del legendario integrante de la orquesta de Osvaldo Pugliese y el Sexteto Tango.
Para la ocasión, Daniel y Adrián formaron una típica integrada por Fulvio Giraudo y Adrián Enríquez (piano); Emilio Longo (contrabajo); Nicolás Velázquez, Sofía Calvet y Federico Santisteban (bandoneones); César Rago, Augusto Sourigues, Ornela Restifa y Bruno Franco (violín); Gustavo Barahona (viola) y Jacqueline Oroc (chelo). En el rubro bandoneonistas invitados se sumaron a los hermanos Ruggiero Horacio Romo, Ramiro Boero, Bruno Ludueña, Natsuki Nishihara, Rodrigo Ávalos y Mariano González Calo. El disco incluye un tango inédito con letra. Se trata de «Chalita», que suena con la voz de Ariel Ardit y en su presentación en vivo contará con el Chino Laborde.
«Recuerdo que estábamos trabajando en algunos temas que hoy forman parte del disco, pero lo que le pasó al mundo con el coronavirus nos partió al medio. Digamos que desde ese entonces el proyecto se fue adaptando a lo posible, a lo real. La idea de este disco homenaje consistía en que haya una semblanza de lo que hizo nuestro viejo en los canales de comunicación que rigen hoy en día. La gestación del álbum puede datar de hace un par de años atrás, pero el proyecto final viene de hace tiempo y se acomodó unos quince días atrás de comenzar a grabar», señala Daniel Ruggiero, quien también es productor del disco y lidera el Quasimodo Trío.
Con un gran repertorio a disposición, uno de los desafíos que sortearon los hermanos Ruggiero fue la selección de los temas, situación que lógicamente llevó su tiempo de análisis. «Digamos que las composiciones de mi nuestro fueron saliendo como bolillas después de una fuerte elección. Eso tuvo su complejidad, pero recién después de todo eso fuimos a buscar a los músicos», dice Adrián, bandoneonista de la Fernández Fierro.
Pero si de especificaciones se trata, la elección de los músicos corrió por cuenta de Daniel. A propósito de esto, revela: «A cada uno de ellos les gustaba algo en particular del repertorio, así que por ese lado ellos fueron los que eligieron. Pero lo que tengo que decir es que a la hora de saber cuáles bandoneonistas tocarían, lo cierto es que la selección fue medio caprichosa de mi parte, como lo es cualquier selección. En los músicos encontramos aspectos generacionales pero también de estilos, porque traté de convocar colegas con distintos perfiles, como Mariano González Calo, Bruno Ludueña, Ramiro Boero, Horacio Romo, Natsuki Nishihara y Rodrigo Ávalos, entre otros. La única premisa que di, más allá de las partituras de todos los temas de nuestro viejo, es que hiciesen lo que quisieran. Al escuchar el disco, siento que lógicamente no se pusieron de acuerdo para hacer un estilo homogéneo, sin embargo hay un sonido único entre todos los arreglos. Los tangos de nuestro viejo tienen pasado, presente y futuro. Siento que estas versiones, esto es muy personal, ofrecen una vuelta de tuerca, una nueva mirada en relación a los originales con Pugliese o del Sexteto Tango. Todos los temas tienen un espíritu tanguero y la variedad entre ellos le dio una nueva vida a esta música».
Otra de las sorpresas que contiene el disco se vincula con «Chalita», un tema inédito de Osvaldo Ruggiero rescatado directamente de sus archivos. «Revolviendo las cosas de mi viejo encontramos la partitura de ese tema con una orquestación avanzada que incluía una nota de Osvaldo Pugliese –revela Adrián–. Daniel lo que hizo fue transcribir y terminarlo, con todo lo que eso significa. Es un tema curioso porque tiene un tinte folklórico, algo que daba vueltas como colores diferentes en la música de mi viejo. Por eso y por otras razones decidimos incluirlo en el disco».
Nota completa: https://www.tiempoar.com.ar/espectaculos/daniel-y-adrian-ruggiero-los-tangos-de-nuestro-viejo-tienen-pasado-presente-y-futuro/